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sábado, 21 de enero de 2012

AKHTAMAR - Poema de Hovaness Toumanian

Isla de Akhtamar
Lago Van

El popular Hovaness Toumanian  el poeta de todos los armenios escribió no sólo sus versiones de leyendas, cuentos de hadas, cuentos folclóricos, proverbios, cuentos infantiles (tenía diez hijos) sino también crítica literaria, ensayo y poesía.
Hovaness Toumanian
Poeta armenio
(1869-1923)

Hijo de un clérigo (de aquellos a los que se le permitía casarse) y una campesina, pasó su infancia en la hermosa región de Lori (Armenia) y estudió en el Escuela Nersessian de Tiflis pero no llegó a graduarse.  Afortunadamente, a través de sus muchas lecturas, acumuló vastos conocimientos.  Y por cinco años se desempeñó como oficinista para la Prelatura Armenia hasta que lo echaron por escribir versos satíricos sobre los sacerdotes.  En su departamento, ubicado en el quinto piso de una casa de Tiflis, el poeta estableció un lugar de reunión para escritores y el grupo se auto-denominó “Vernadoun” (el ático o piso de arriba).  Toumanian se destacó además por la ayuda, legendaria que brindó a otros escritores, necesitados y  huérfanos, y por llevar una vida activa  y a la vez desinteresada en la comunidad armenia.  En 1916, con la colaboración de Valery Broussov editó una antología, La Poesía de Armenia.  Sus famosas interpretaciones de poemas de la tradición oral armenia incluyen versiones de David de Sasún y Akhtamar.  

Akhtamar  (1891)



De su aldea a orillas del
Lago Van un joven camina  y
Se adentra en el mar.
Sin bote, sin vela
Abre el agua con brazos
Viriles y nada hacia
La isla que flota frente a él  
Desde donde brilla una sola luz 
Que cual faro lo guiará.
Todas las noches la hermosa Tamar prepara 
El fuego en la playa y
Escondida entre arbustos cercanos

Aguarda, impaciente
El mar, pesado se enrosca y ruge
Pero el corazón del joven, boyante
Pelea el golpe de las aguas
Que le gritan al oído.
Y cada vez que rompen las olas
Palpita con el agua el corazón de Tamar 
Y se va quemando  la candela
Que arde en la oscuridad.
Ahora, el silencio.  
En la playa oscura
Una sombra negra encuentra a la otra
y forma una nueva sombra.
Sólo las olas del Lago Van
Tocan la orilla y regresan al mar
Gruñendo noticias sordas y
Susurrándoles a las abovedadas

Estrellas vergonzosos nombres
para la virginal Tamar.

Mientras las aguas murmuran sus chismes
Se acaba el tiempo para los dos.
Él se interna en el encrespado mar
Ella se queda atrás y eleva una plegaria.
¿Quién es aquél tan valiente y atrevido
Tan embriagado de amor
Que desafía noche y  mar?
¿Quién es aquel que de orillas desconocidas
Llega para besar a nuestra Tamar?
¿Quién se cree él que somos nosotros
Para entregársela?
Así, hoscos, retan  los jóvenes de la isla al extraño
Hasta que una noche apagan el fuego que ha encendido Tamar.
Nadando hacia ella, el amante
Se pierde en la oscuridad.
El viento eleva sus suspiros.
¡Akh! (Oh) Tamar, llama él
Bajo las rocas escarpadas
En la terrible oscuridad
Donde el mar grita, salvaje
¡Akh! Tamar, suplica él.
Las aguas ondulantes y calmas de la mañana
Lo depositan en la orilla, y 
En sus labios fríos dos palabras
Se han congelado para siempre:
Akh! Tamar, el nuevo nombre de la isla.
 
Tamar y su luz
Traducción del armenio al inglés. Diana Der Hovanessian
Traducción libre del inglés. Violeta Balián


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